viernes, 12 de junio de 2009

Sección de lácteos

¿Los supermercados están enhuesados con los frascos de “Crema agria” que se encuentran ubicados en la sección de los lácteos —junto al suero—?, ¿hay gente que compre eso? Es que siempre que paso por ahí, veo los mismos tres frascos —con cara de “llévame y cómeme”— que veía en el mismo sitio hace como diez años (tal vez sólo sea producto de mi humilde y catastrófica percepción). Los pobres están decepcionados de la vida, deben estar aguantando buen frío.
Y del “Requesón”, mejor ni hablar. No logro comprender cómo es posible que a estas alturas de la vida, a alguien se le pueda ocurrir que semejante mezcla absurda llegue a formar parte de las representaciones mentales que otros seres como yo poseen de una “comida deliciosa”. Hace un par de años tuve la desdicha de probar esa fea crema —si es que a eso se le puede llamar crema— y me pareció horrible, asquerosa. Además, se me quemó el paladar.
Para empezar, no sabía que no tenía sal; así que, cuando esa sustancia ingresó a mi organismo, sentí que se me puso la cara azul. Entonces tomé la decisión de echarle un poco de sal, pero aún así —por defecto de fábrica—, seguía sabiendo a talcos Mexana con queso viejo, leche y sal. Ya hablando un poco de gustos, no me gusta la leche, pero tolero uno que otro yogurt (con sabor) y el suero y el queso me pasan, pero la leche sola no. Ah, los yogurtcitos “Activia” de fresa son ricos, saben a Alpinito ("Te alimenta y sabe rico"...) pero el de ciruela no me simpatiza para nada. Y ya me aburrí del Alpinette. El Bon Yurt me da igual, aunque a decir verdad: creo que comer Zucaritas con yogurt, es como comerse un tarro de Nutella con una saltinita. Las personas no comen Saltinas con Dip, comen Dip con Saltinas; pero por cuestiones de autoestima (¿delirio de grandeza?) no lo aceptan, no aceptan las intenciones conductistas que tienen con la galleta, que a la larga lo único que les está haciendo es un favor.
Hay cosas que a la gente le parecen desagradables, pero que a mí en lo particular me agradan, por ejemplo: la Emulsión de Scott. Es rica, tan rica como para hacer unas paleticas y comérselas (...).
Suena ordinario, pero si nos ponemos a pensar un poco: hay cosas más ordinarias en esta vida, como tomar champaña con patacón, eso sí es ordinario.

3 comentarios:

  1. Saludos colega. Me gusta como describes las cosas, pareces ser una buena combinacion entre paciente y terapeuta. Buen análisis de mercadeo, seria entretenido salir a vitrinear contigo jeje. Y por fin sé de otra persona a la que también le gusta la Emulsión de Scott. Pásala bien...

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  2. la verdad que entretenido que eres me has hecho reir, si ese fue tu objetivo lo lograste hace tiempo que no leo algo asi tan chispeante tanto en la original formacion de tus oraciones como en tu basta imaginacion aplicada sobre los sucesos reales sigue asi te doy 10 puntos .....besos monica

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  3. gracias has sido mi fuente de inspiracion.....

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